El fugitivo, de John Ford (1947)

11.11.2020

En un estado mexicano el gobierno está persiguiendo a todos los sacerdotes católicos para defender los logros de la revolución socialista. Un sacerdote lucha entre sus deseos de supervivencia y su sentido de responsabilidad de aquellos que necesitan el consuelo de la fe para vivir los actos cotidianos de sus vidas. Basado en "El Poder y la gloria" de Grahan Greene, John Ford hace un retrato del personaje de Henry Fonda entre una dirección de fotografía maravillosa. Entre "San Manuel Bueno Martir" de Unamuno, y el propio "1984" de Orwell, la historia llama la atención de la estrecha unión que hay entre la libertad religiosa, y la libertad ideológica. Entre los impulsos revolucionarios del poder para transformar la realidad, y la necesidad de proteger los derechos individuales y la intimidad personal frente a las bondades sociales que se prometen en el nombre de las grandes ideologías. Puro siglo XX. John Ford lo retrata en uno de sus temas predilectos: el hombre desarraigado en busca del consuelo de la comunidad (y el fracaso para lograr esa reconciliación)